¿Te acuerdas de cómo empezaste a leer?
Cuando aprendiste a leer no entraste por la puerta del colegio sin saber y a la que te fuiste esa misma tarde ya dominabas El Quijote en castellano antiguo.
Para saber leer tuviste que empezar con las vocales, después las consonantes, luego el abecedario. Después vinieron las sílabas, ja – je – ji – jo – ju, pa – pe – pi – po – pu hasta que finalmente a base de juntar sílabas, empezaste a distinguir palabras sueltas, que a su vez formaban frases.
Y solo entonces empezabas a enterarte de algo.
Aprender es un proceso de reajuste continuo donde ser constante es fundamental. No es un Ferrari que se ponga a 100 en un segundo.
Necesita su tiempo y sobre todo, necesitas equivocarte para poder sacar de ahí una experiencia que te permita hacerlo mejor la próxima vez (recuerda la escala en tu vara de medir).
Tampoco se trata de que no haya fallos ni errores. Es más, gracias a que los hay es que puedes ajustar tu proceso, aprender, trascender y evolucionar.
Siento que me acaban de describir. Querer que todo salga bien (aún sabiendo que no está mal si no sale «perfecto») es uno de mis mayores frenos al momento de querer tomar acción. La pienso tanto que me quedo pensando y al final no hago mucho, a veces nada. Claro, y después viene toda la culpa por no haberlo hecho.
Hola Samya! muchas gracias por tu comentario y por dedicar tu tiempo al post. Si sientes que te ha descrito, no es porque lea mentes sino porque le pasa a muchas personas lo que comentas. Es la famosa pescadilla que se muerde la cola y claro, después suele llegar la culpabilidad y el ‘por qué no lo he hecho’. Por eso siempre insisto en lo importante que es entender qué es lo que te frena, resolverlo desde la raíz, precisamente para poder superarlo y tomar acción. Está muy bien decir: ‘si sientes miedo, hazlo con miedo’, pero luego a la… Read more »
Alooooo, Muy buen artículo que toca fibras sensibles para los que somos perfeccionistas. Aunque yo al menos considero que acabo de salir del Centro de Rehabilitación del club de los perfeccionistas jejeje. Acotaría algo que me ha ayudado enormemente en mi proceso de transformación: 1.- Escribe la meta global 2.- Escribe las submetas que te llevarán a esa meta final 3.- Dale prioridad a aquellas tareas vitales y deja a un lado las que no tienen relevancia (punto álgido para un perfeccionista) 4.- Ponle una fecha y alternativamente para no ser tan duro y exigente (una segunda fecha tentativa pero… Read more »
Hola Hernán! muchísimas gracias por tu comentario y por proponer más puntos. Me ha hecho gracia lo del club de los perfeccionistas, hehe, me he imaginado hasta los carnets de socios y todo. Discrepo un poco con el punto 7, porque me parece imposible no pensar, en el sentido que tu cerebro necesita procesar todo. Incluso si al final dices ‘qué leches, lo voy a hacer, con o sin miedo’, ese proceso anterior de pensar ha tenido que suceder sí o sí. Pero vamos, entiendo lo que quieres decir y me ha encantado que cuentes lo que te pasó a… Read more »
Como siempre, cada tema que tocas, me cae al dedillo, abre mi mente, aprendo y de paso me tranquilizo. Se me ocurre que muchas veces queremos ser «perfeccionistas» poque aún sin darnos cuenta queremos que alguien o los demás nos aprueben. Será resultado de algunas creencias limitantes?
Hola Betty! muchas gracias por tu comentario 🙂 Pues así, sin saber más, no te sabría decir. Me refiero que habría que valorar cada caso en concreto, pues ya sabes que cada uno en nuestra cabeza hacemos las cosas de diferente manera. Ten en cuenta de todas formas que la aprobación, vista como sentido de pertenencia a un grupo, es una necesidad básica del ser humano. El sentir que gustamos, que nos aprueban. Pero ya te digo, que habría que valorar dependiendo de cómo lo haga cada persona. Un abrazo!
Excelente información, es verdad por querer que todo este perfecto , hace que las cosas no salgan como uno quiere y termina renunciando, gracias
Hola Graciela! muchas gracias por tu comentario. Como tú dices, el querer que todo salga perfecto hace que la mayoría de las veces renunciemos, incluso antes de empezar. Por eso es importante tener en cuenta esas claves y saber que la mejor manera de mejorar, es con la información que obtenemos de la práctica. Un abrazo!
«La idea es que te valores por quien eres, y no por lo que haces.» ¡Eso y la imagen de la regla fueron lo mejor del post! Te sigo hace bastante Patri, pero no sé si te he comentado con anterioridad. Me gusta mucho lo que hacés y tomé muchos de tus consejos. Siento que de a poco voy «domando a la fiera». Estoy componiendo una canción sobre el perfeccionismo, el síndrome del impostor y los emprendedores digitales. Se llama «plan de sabotaje» y sabé que tu newsletter fue una fuente de inspiración. Me haría muchísima ilusión mostrartela cuando la… Read more »
alaaaa!! pero qué ilusión Rocío! me ENCANTARÁ escucharla cuando la acabes, menudo regalazo tus palabras y que mi newsletter te haya inspirado para componer!! no tengo palabras! gracias, muchas gracias y otro abrazo de gol enorme para ti 🙂